LA MANERA CORRECTA DE ACTUAR EN LA ENSEÑANZA

El tacto pedagógico principalmente se manifiesta en el momento de dejar ser y actuar al niño ante cualquier circunstancia, por eso se manifiesta retrasando o evitando por completo la intervención del adulto ya que es importante saber en que momento intervenir del problema para bien del niño y que este se pueda desenvolver y resolver por si solo cualquier problema.
Una forma de evitar esto es la paciencia ya que es una virtud fundamental de todo profesor la paciencia permite al maestro integrar al niño al aprendizaje.
El tacto también se manifiesta como receptividad a las experiencias del niño, el profesor no solo debe enfocarse en la situación académica también debe enfocarse en lo que le preocupa a cada niño ya que es un efecto positivo para su aprendizaje.
Un profesor que tiene tacto se da cuenta que no es el niño el que tiene que ir hacia el, si no él ir hacia el niño, para que éste pueda tener interés.
El tacto se manifiesta como el don de saber improvisar, enseñar es improvisar, el profesor necesita saber lo que es pedagógicamente correcto hacer o decir para el bien de los alumnos.
El tacto pedagógico es una forma de actuar en la educación, describe la forma de actuar en las relaciones enseñanza/aprendizaje, si se actúa con criterio pedagógico se influye sobre el estudiante, pero si esta influencia se realiza con tacto entonces no será autoritaria o controladora, hace lo que es correcto o bueno para el niño, preserva el espacio del niño, protege lo que es vulnerable para el niño, evita el dolor hasta llevarlo al olvido, recompone lo que se ha roto para bien del niño.
El tacto pedagógico confía en nuestra habilidad para detectar las necesidades de un niño mediante la utilización de los ojos, lenguaje, silencio, gestos, etc.
En si esta lectura me gusto ya que trata puntos muy importantes en la enseñanza de los niños, la forma de actuar y comportarse para el bien de estos, que hay que saber encontrar el momento justo para poder intervenir con los alumnos, etc., creo que me será de mucha ayuda en las practicas posteriores ya que trata puntos muy importantes y que tienen que ser aplicados para poder llevar a cabo con éxito la práctica docente.
El tacto pedagógico (Max Van Manen)
El tacto en la enseñanza. (Capitulo 7)
La practica de la pedagogía
pp. 159-192
EL TACTO Y LA ENSEÑANZA

La solicitud y el tacto pedagógico son habilidades conscientes que permiten a un profesor actuar de manera improvisada en las situaciones educativas.
El tacto proporciona una forma nueva e inesperada a las situaciones imprevistas, el tacto da un significado accidental.
Preparar una clase no consiste en programar un guión inflexible, planificar es considerar detenidamente, anticipar, imaginar cómo pueden ir las cosas, cómo pueden experimentar o ver las cosas los niños.
En situaciones imprevistas el profesor tiene que saber qué decir o hacer para poder, con tacto, modificar o reorientar la clase de forma responsable y receptiva.
Una pedagogía con tacto, trata de evitar las circunstancias y los factores que hagan la experiencia dolorosa para los niños en si el tacto se interesa por el interés del niño.
La disciplina con tacto genera autodisciplina en los alumnos, también el tacto humorístico crea nuevas posibilidades, el humor es eficaz cuando las relaciones son desiguales entre el profesor y los alumnos.
Esta lectura se relaciona mucho con la anterior ya que trata de cómo debe de ser una buena enseñanza, aquí se agregan algunos puntos extras como lo de la planeación flexible, la disciplina, el humor con que se deben tomar algunas circunstancias, etc..
En si esta lectura al igual que la pasada me va a ser de gran ayuda para mis prácticas ya que maneja situaciones por las que he pasado pero en su momento fueron difíciles para mi resolver y con ayuda de estas dos lecturas podré darles la importancia que se le debe de dar y la solución de estás, no sin antes olvidar que con la práctica día a día se pueden lograr las cosas.

El tacto y la enseñanza (Max Van Manen)
El tacto en la enseñanza. (Capitulo 8)
La practica de la pedagogía
pp. 193-214